Hay muchas promesas sin cumplir, especialmente cuando de hábitos no saludables se trata. En ocasiones, no solo esperamos al fin de semana para comer “algo delicioso”, y sin darnos cuenta incluimos, cada vez más, hábitos que solo perjudican nuestra salud.
Una alimentación adecuada no es una tarea muy fácil de llevar, en el camino encontrarás muchos obstáculos que podrían interrumpir tus planes de seguir un ritmo de vida sano.
Pero, no hay de qué preocuparse, con un poco de apoyo, paciencia y constancia todo es posible. El ser humano adopta muchas costumbres mientras crece, entre ellas algunas incorrectas, y estas por lo general suelen estar asociadas al proceso de alimentación.
Si quieres mejorar tu salud y sentirte mejor, conoce estos hábitos no saludables que debes evitar si valoras tu vida.
Comer entre horas
La ansiedad de querer probar algo entre horas puede deberse a la errónea ejecución de un plan alimenticio, el cual no necesita estar a un nivel profesional para aplicarse. Con solo desayunar, almorzar y cenar ya se convierte en un plan de alimentación relativamente sano.
Pero, si no desayunas, tu cuerpo no tendrá las calorías y los nutrientes suficientes para llevar a cabo sus funciones diarias.
Además de eso, no desayunar genera pérdida de concentración, agotamiento que en algunos casos puede ser extremo, acompañado de un fuerte dolor de cabeza. Y por supuesto, comer entre horas puede generar una subida de peso casi imposible de controlar.
Este es un hábito no saludable que también puede provocar estrés o un poco de aburrimiento. Picotear algo un chocolate o unos caramelos, sí bien puede satisfacer a tu paladar, esta felicidad solo durará unos escasos minutos.
Y por no permitirle a tu cuerpo desayunar, querrás continuar con los dulces hasta satisfacer a tu estómago, el cual sentirás como un pozo sin fondo.
Sustituir alimentos sin supervisión médica
Como hábitos saludables solemos recomendar dietas, pero si las mismas no son realizadas correctamente, en lugar de beneficiar al cuerpo, lo único que harán será perjudicarlo.
El ser humano suele valorar lo que tiene una vez que lo pierde y esto ocurre también, cuando hablamos de algunas tallas de más. Es ahí cuando algo en nuestra cabeza nos dice que debemos bajar de peso a cualquier costo, sin importar que los hábitos que decidamos tomar, afecten nuestra salud.
Muchas personas suelen sustituir algunos alimentos o comidas por productos sin azúcar o light, los cuales, durante su producción, pierden muchos nutrientes.
Y, aunque estos productos, son fabricados para sustituir la grasa de algunos alimentos por edulcorantes, lo cierto es que no dejan de contener azúcar y si su ingesta es prolongada, pueden provocar afecciones como la diabetes.
Durante las dietas mal ejecutadas es común saltarse algunas comidas, porque se tiene la creencia muy equivocada de que, mientras menos comidas se ingiera, mayor será la posibilidad de bajar de peso, pero no es así.
De hecho, al hacerlo, lo único que se puede lograr es poner en riesgo la vida, y que la persona sea víctima de un cuadro de ansiedad tan grande, que la lleve a ingerir alimentos en muchas cantidades, cuyo cuerpo no podrá asimilar tan rápido.
En este punto también es importante mencionar que, los alimentos preparados que suele adquirir, cuando al parecer no tienes el tiempo suficiente para preparar algo delicioso y saludable, son cúmulos de grasa y azúcar, muy dañinos para la salud.
Y si es el tiempo el que interviene en tu proceso por evitar los hábitos no saludables, te contamos que existen comidas muy sanas que puedes prepararte en poco tiempo, como los batidos de frutas y las ensaladas.
Eliminar los hidratos de carbono y las grasas
Aunque no lo creas, la eliminación de los hidratos de carbono y las grasas, es uno de los hábitos perjudiciales para la salud más comunes, que solemos aplicar cuando deseamos perder peso.
Los carbohidratos se convierten en la fuente de energía que el cuerpo necesita, para tener un rendimiento acorde a las actividades que debe realizar durante el día. Su ausencia puede provocar agotamiento intenso y alterar el ritmo del corazón.
Y cuando de grasas saludables se trata, evita eliminarlas mientras intentas llevar a cabo una dieta, porque, en realidad, son nutrientes que el organismo necesita para funcionar correctamente.
No todas son tan malas como muchos piensan. De hecho, la poca ingesta de grasa puede contribuir con la pérdida de los tejidos ¡Si! Y, el volumen de estos se ve afectado, especialmente en los músculos.
Lee más sobre los hábitos de alimentación saludables.
Reducir las horas de sueño
El ser humano debe dormir al menos 6 horas al día, si no lo hace no se sentirá con energía, y puede ser presentar mal humor, cansancio, dolor de cabeza y muchas molestias más.
Y cuando de molestia se trata, el estrés no deja de ser una de ellas. Experimentar mucho estrés puede interferir con la salud de cualquier organismo.
Este no solo afecta la salud mental, sino además, la física. Dependiendo de su nivel, puede generar problemas emocionales y pérdida de cabello.
Prolongados episodios de estrés pueden ser el resultado de pocas horas de sueño, es por ello que esto es visto como un hábito no saludable. Por ello, se recomienda, alimentarse bien y descansar lo suficiente para que el cuerpo no experimente estas afecciones, luego.
Ignorar la salud de la piel
La piel es el reflejo del buen funcionamiento del cuerpo. Por esa razón es tan importante cuidarla, especialmente del sol. Si no te proteges de los rayos del sol, incluso durante el invierno, es muy probable que sufras de afecciones que involucren la salud visual, quemaduras, dolores de cabeza e insolación.
Para evitar lo anterior, es necesario usar protector y no recurrir a las salas de bronceado. Porque si bien estas pueden, además de permitir disfrutar de un tono de piel más atractivo, de acuerdo a tu estilo, también pueden crear una capa que puede proteger a la piel, y brindarle algunos nutrientes.
Pero, si es aplicada con regularidad, existe la posibilidad de que la persona sea víctima de cáncer de piel.
Sedentarismo
Al permanecer todo el día encerrado en casa, sin realizar al menos una actividad física, sometes a tu cuerpo al sedentarismo, uno de los hábitos no saludables más comunes.
Y no imaginas cuánto puede afectar el sedentarismo a la salud. Porque no solo puede generar cardiopatías, sino además afectar el funcionamiento del cerebro.
Al no salir de casa, condenas también a tu cuerpo a la soledad y este requiere oxigenarse, algunas veces disfrutar un poco del aire libre y pasar tiempo en esos espacios donde la vegetación dice presente. Si lo haces, podrás experimentar un estado de ánimo placentero.
Abusar del trabajo
Tal vez las deudas no te dejen dormir lo suficiente, pero eso no es motivo para someter a tu cuerpo a largas horas de trabajo. De hecho, mucho trabajo puede interferir con tu ritmo de vida diario, generando estrés, dolor de cabeza, ansiedad y en última instancia, depresión.
Porque luego de varias horas exigiendo al cuerpo tener energía, notarás que algunas cosas no saldrán como las esperas, acción que puede interferir con tu estado de ánimo.
El trabajo no deja de ser necesario para sobrevivir, pero sin duda, se encuentra entre los hábitos no saludables más comunes.
Trabajar demasiado puede afectar tanto tu salud emocional como física y tal vez no lo notes, pero es posible que también interfiera con tu forma de relacionarte.
No cuidar el cabello y dientes
No lavar el cabello, de acuerdo a lo recomendado por los especialistas, puede generar su caída temprana.
Otro hábito que también puede debilitarlo es el uso regular de secadores y planchas y, la aplicación de tintes. Muchos de los tintes tienen compuestos muy fuertes para el cuero cabelludo y aunque el resultado puede mostrar un cabello agradable a la vista, con el paso del tiempo, se notará su debilidad.
No cuidar la salud bucal también forma parte de los hábitos no saludables. Los dientes pueden sufrir si no son limpiados con regularidad, la aparición de caries y demás afecciones a nivel bucal, dicen presente cuando dejas la salud de tus dientes a un lado.
Usar zapatos altos con regularidad
Aunque sean muy solicitados, especialmente por las empresas para dar una apariencia profesional, en realidad muchos expertos de la salud, están en desacuerdo con el uso regular de los zapatos altos.
Porque estos pueden provocar, no solo artrosis, sino además degeneración en algunas articulaciones.
Por ello, antes de elegir los tacones altos para tener todas las miradas, recuerda que tu cuerpo será quién sufra las consecuencias. En su lugar, mejor utiliza calzados un poco más bajos y cómodos.
Abusar de los aparatos tecnológicos
El uso prolongado de teléfono celular, computadora y televisión, forman parte de los hábitos perjudiciales para la salud.
El cuerpo necesita descansar, y si justo luego de dejar de usar el aparato tecnológico te vas a la cama, no podrás realizar dicha actividad o al menos no completa.
Estar al frente de una pantalla, además, genera problemas en la vista y contribuye con el sedentarismo, lo cual, a largo plazo, puede provocar imposibilidad de reaccionar correctamente ante ciertas situaciones, obesidad y por si fuera poco, problemas de movilidad.
Ingerir más líquidos de lo adecuado
Con esto nos referimos específicamente a los zumos de frutas. Si bien estos pueden ser deliciosos para el paladar, no podemos ignorar que algunas frutas disponen de un elevado contenido de azúcar, el cual suele registrarse especialmente en sus zumos.
Además, al preparar dicha bebida, se está eliminando la fibra de la fruta y a su vez, se genera una sobreingesta y el riesgo a sufrir de caries y enfermedades como la diabetes.
En este apartado también dicen presente las bebidas energéticas y aunque estas, al parecer, brindan energía al cuerpo, la misma no es más que una energía falsa que solo está cubriendo las grandes cantidades de azúcar que llevas a tu cuerpo.
Ignorar la salud cerebral
Si no quieres ser víctima de hábitos no saludables, es necesario que estimules a tu cerebro. Con ello estarás evitando presentar problemas cognitivos.
Estimularlo en realidad es sencillo, puedes hacerlo estudiando, aprendiendo un nuevo idioma o leyendo un poco todos los días. Si prestas más atención a tu salud cerebral, tanto tu memoria o estado de ánimo, mejorarán considerablemente
Abusar del alcohol
Aunque está científicamente comprobado que bebidas como la cerveza y el vino pueden aportar nutrientes al organismo, la ingesta excesiva de alcohol afecta el ritmo de vida de cualquier persona.
Y si acompañas el alcohol con tabaco, el resultado es aún más grave. Al fumar, intervienes con el funcionamiento normal de las células del sistema respiratorio, lo que a su vez se traduce en enfermedades respiratorias.
Más hábitos no saludables
Otro de los hábitos que puede agravar tu salud es, definitivamente, no consultar con un especialista, antes de llevar a cabo cualquier tipo de cambio en tu rutina diaria que involucre tus comidas.
Y hablando de comidas, evita prestarle atención a los falsos mitos de alimentación. Muchas personas creen que el pan integral tiene menos calorías que el blanco y la realidad es completamente distinta, de hecho, ambos tienen la misma cantidad.
Sin embargo, existe una diferencia, y es que en cuanto a fibra, el pan integral se lleva la delantera, pero no por ello vas a ignorar a los beneficios que puede ofrecerte una rebanada de pan blanco, siempre y cuando su ingesta no sea excesiva.
Evita también el consumo de fármacos como los analgésicos, porque estos, aunque pueden ayudarte a aliviar molestias como el dolor de cabeza, también pueden convertirse en adictivos y la sobredosificación, especialmente de los analgésicos, puede poner en riesgo tu vida.
Debes hacer hasta lo imposible por evitar la práctica de hábitos no saludables. Es importante visitar a un profesional aunque te sientas sano.
Una revisión médica no estaría de más, esto te ayudará a evitar el desarrollo de algunas afecciones a largo plazo y al mismo tiempo, garantizar tu integridad no solo física, sino además, mental.